Por medio de los movimientos de la cabeza y de los ojos se integran las imágenes de movimiento que posteriormente determinan imágenes de esquemas.
El lóbulo parietal desde el punto de vista neurológico juega un rol importante en la integración del esquema corporal, y la estructuración dinámica es la encargada de asociar los diversos mensajes correspondientes a los diferentes sentidos; permitiendo que a través del curso de la infancia, con la manipulación del cuerpo del niño o en los juegos que el niño realiza en el espacio de su cuna, o en su entorno, como dice Piaget "relacionando así su cuerpo con el mundo exterior". Esta imagen del cuerpo así formada, no es una síntesis de sensaciones actuales, siempre presente. Este tipo estrucutral o patrón está inscripto en la corteza cerebral donde se constituye como elemento importante y permanente.
La imagen del "yo corporal", la imagen presente, es en último término la consecuencia de toda una actividad pasada, y es el estado actual del YO, dado por todos los fenómenos que lo han integrado en el pasado.
Diversos autores han insistido sobre la importancia que tiene en neurología esta noción esencial; ocurre que en los amputados hay alucinaciones de miembros fantasmas , a menudo dolorosas, en ellos hay una persistencia total y normalmente integrada del cuerpo.
El miembro fantasma es una creación psico-fisiológica del cuerpo, donde la persistencia de la imagen integrada del esquema corporal no es modificada por la amputación. La mutilación altera el organismo al cuerpo en sí pero no a la imagen que la persona tiene de su cuerpo. La imagen es a la par estática y dinámica, ya que el amputado tiene el sentimiento de la presencia de su miembro y de que él se mueve y sobre el cual él también cree apoyarse.
Otras veces ciertas lesiones cerebrales producen sensaciones de deformación del cuerpo, y otras de desconocimiento de sectores del cuerpo, como así también de la desaparición de su imagen reflejada en el espejo.- Dr. Luis Stoppa